La colección nace de las creencias de los Kanaka Maoli, una tribu originaria de Hawái. Para ellos somos más que aquel cuerpo que habitamos. Somos la tierra bajo nuestros pies, el cielo sobre nuestras cabezas, el océano que representa nuestras emociones, la selva que nos abraza y el fuego del volcán que habita en nuestro corazón.